CIUDAD MALDITA

Ciudad Maldita toma el ataque al destructor Sheffield de la Royal Navy por aviones de la Armada Argentina durante la guerra de Malvinas para contar una historia fantástica, de suspenso y paranoia. Tras el ataque y un naufragio, seis militares y una enfermera del ejército británico sumado a un espía norteamericano creen encontrar refugio en una desconocida y desolada ciudad. Sin embargo, la Ciudad, será su peor adversario.

El Argumento de Ciudad Maldita corresponde al reconocido director cinematográfico Fernando Spiner, el guión está a cargo de Néstor Petruccelli, los dibujos son obra de Beto Lorenzo, quien fuera colaborador del gran Solano López y editada por sello Locolectivo.

Sinopsis

En 1982, durante el conflicto bélico entre Argentina y Gran Bretaña por la soberanía de las Islas Malvinas, el 4 de Mayo de 1982, a las 11:04 A.M., hora argentina, dos aviones Super Etendard de la Armada Argentina, piloteados valientemente al ras del mar para no ser detectados por el enemigo, lanzaron sus misiles exocet contra el buque de guerra H.M.S.Sheffield de la Royal Navy.

Tras el ataque se produjo un extraño suceso que ha permanecido desconocido y que en estas páginas se trata de  dilucidar. Mientras el destructor se incendiaba y comenzaba a hundirse, cinco marinos británicos de distinto rango y una enfermera se echaron a la mar en un bote salvavidas.

Durante el naufragio rescataron a un militar norteamericano, cuyo helicóptero extrañamente se precipitó al mar cuando estaba realizando tareas de espionaje.

A la deriva y ya sin esperanzas, los náufragos descubren las luces de una ciudad costera que irrumpe en medio de la noche oscura. La ciudad parece estar deshabitada, aunque todo sigue funcionando. La ciudad parece un anfitrión ideal, ya que les provee alimentos, medicamentos y armas, pero no la posibilidad de comunicarse con el exterior.

Al advertir que ningún mapa registra la existencia de la ciudad, los marinos dudan si no se trata de una trampa. Unos sospechan del espía norteamericano y otros llegan a plantearse que en realidad ya están muertos.

La situación es límite, la falta de comunicación con el exterior genera desconfianza, miserias y paranoia dentro del grupo. Confrontan entre ellos, por las decisiones a favor y en contra del gobierno británico que los llevo a la guerra, algunos a ser asediados por sus propios recuerdos y en el caso de la enfermera a ser víctima de acoso sexual.

A medida que pasan las horas, la ciudad se deja ver como un enemigo que los vigila y que, con ciertos recursos argentinos, se propone exterminar a cada uno de los invasores.

Motivación por el proyecto de la historieta.

Me sentí atraído a construir una historia de terror metafísico a partir de un hecho real tan poderoso y cercano como la guerra de Malvinas. La idea de que los protagonistas fuesen nuestros enemigos en esta contienda tan dolorosa como es la guerra, podía facilitar un abordaje de “Género” no tradicional para las historias bélicas siempre más cercanas a la épica, el drama o la trama psicológica. Aquí el punto de partida es la guerra, pero aunque el contexto bélico nunca desaparece para los protagonistas, la historia se convierte en la de un grupo de personas atrapadas frente a un peligro desconocido que no logran develar y del que no pueden escapar.

En una oportunidad conocí en Los Ángeles a un productor de cine que me propuso realizar una película con alguna de mis historias pero hablada en inglés. Esta cuestión me puso en un gran dilema pues se trataba de algo ajeno a mí y por lo tanto muy difícil de abordar. Además la disyuntiva crecía al sentir que de este modo colaboraba con el colonialismo cultural que actualmente padecemos. Sin embargo, como fanático cineasta enamorado de su oficio y conciente

de las dificultades para llevar un proyecto cinematográfico adelante, no dejé pasar la oportunidad y trabajé en la búsqueda de un relato en que el uso del idioma inglés fuera genuino y funcional a la historia, y que al mismo tiempo fuera cercano a mi propio imaginario.

“Ciudad Maldita” es el resultante de este proceso, que solo pudo empezar a concretarse cuando lo encaramos como una creación colectiva junto a dos grandes como Néstor Petrucelli y Roberto Lorenzo.

Esta historieta es el principio de un largo proceso que continuará con el rodaje de una película y culminará con la recuperación de las islas para nuestra patria.

Beto Lorenzo.

Nació en Buenos Aires en 1957.Psicólogo egresado de la UBA, su experiencia en las artes plásticas estuvo ligada desde chico a la enseñanza informal. Hizo un curso de realización de cine de Super 8 y guión en la Escuela Panamericana de Arte.

Integró parte del staff de revistas subterráneas en la década de los 80, como “O NO” y “H.G.O.”.

Realizó algunos backgrounds para Carlos Meglia en “Cybersix”.

Fue asistente de Lucho Olivera en la tira diaria “Pepe Moreno” publicada en el diario Río Negro, escribiendo el guión de los 2 últimos meses de esa historia.

Trabajó con Solano López en el diseño de escenas inspiracionales para la película animada “Eva de Argentina”, realizando también parte del story board.

Escribió el guión de la historieta “La Triple Alianza” con dibujos de Solano López para la revista “La Patria Dibujada” y lo asistió en la realización de la última parte de “El Fin del Mundo”, historia concluyente de la saga de El Eternauta.

Dibujó “Los Horneros” para la revista Fierro y las tiras diarias “Juan Sur” y “La Nación Insólita” para la agencia Télam.

Escribió la trilogía de ciencia ficción “Voraces”, novela con ilustraciones propias.

Motivación para el proyecto de la historieta.

Yo había conocido a Néstor por intermedio de Solano y desde entonces nos encontramos a hablar sobre nuestros proyectos. En charlas de café intercambiamos argumentos pensados para historietas que podían trasladarse al cine, y viceversa. Uno de esos días me comentó de la intención de Fernando Spiner de hacer una historieta con una de sus ideas. Luego de escuchar la trama y sin dudarlo me sumé al proyecto y en cuanto me dieron el guión me puse a dibujar. Lo más interesante de la historia me pareció el abordaje de la guerra de Malvinas desde lo fantástico y el conflicto entre los personajes. Mi trabajo me impidió dedicarme full time al dibujo y casi dos años después estuvieron listas las 70 páginas del guión, hechas a tinta china y con el privilegio de ser la antesala de la película de Fernando.

Néstor Petruccelli

Nació en Buenos Aires en 1960.

Guionista egresado de ENERC (Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica), dependiente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales

Guionista de historietas egresado de CEFOPRO (Centro de Formación Profesional) dependiente del ENERC. Guionista de Telenovelas egresado de Guionarte.

Licenciado en Enseñanza de las Artes Audiovisuales de la Universidad de San Martín (UNSAM).

Colaborador en la revisa de cine y series La Cosa, publicó en la revista Comic.ar.

Curador de la muestra Cine fantástico Argentino. Escribió guiones para cortometrajes, telenovelas e historietas.

Premio Argentores por el Radioteatro: “No me saque”.

Guionista del film “Buno Motoneta” (2018) dirigida por Pablo Parés.

Motivación por el proyecto de la historieta.

Cuando Fernando (Spiner) me convocó escribir el guión sobre una idea que desde hacía tiempo le venía dando vueltas para realizar un film, además de ser un halago, representó un importante y lindo desafío porque presentaba la oportunidad de escribir para un director al que seguía de cerca su filmografía y los géneros que abordaba. El entusiasmo se acrecentó cuando la historia propuesta contaba con toques fantásticos partiendo de un hecho histórico como es la guerra de Malvinas. En esta trama donde la ciencia ficción se cruza con el terror psicológico, el lector va a encontrar referencias argentinas que por ser  cotidianas suelen pasar inadvertidas pero que acá cobran un papel de vital importancia.

Tras tener el guión nos propusimos que, mientras se hacia el camino de llevar la historia al cine, la presentáramos en formato de historieta. Fue el momento de convocar a un gran dibujante como Beto Lorenzo quien además de sus excelentes trabajos personales fue colaborador nada menos que del memorable Francisco Solano López.  Beto interpretó de inmediato el espíritu de la trama y le aportó con su lápiz el clima de misterio y tensión que trasmite en cada viñeta. Como experiencia personal me siento privilegiado por haber podido trabajar con estos artistas y profesionales con los cuales comparto por cuestión generacional haber sido testigo de uno de los sucesos que da inicio a la historieta. Pero sobre todo,  dos amigos que hicieron más emocionante la tarea de llevar a cabo esta obra que se ve plasmada en estas páginas.